La Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) inició un proceso sancionatorio y formuló cargos contra la empresa Servicios Sanitarios San Isidro S.A., apuntando a vulneraciones de la normativa ambiental en la operación de la planta de aguas servidas de la localidad de Labranza, en Temuco.
Esta determinación se da después de distintas fiscalizaciones y del análisis de requerimientos de información por el proyecto “Traslado de la Planta de Tratamiento de Aguas Servidas, Labranza, ESSSI S.A.”. En concreto, la SMA solicitó que la empresa remitiera datos sobre los lugares de muestro al cuerpo receptor del río Cautín, resultados de monitoreos en el mismo afluente y también el estado de la infraestructura, permisos sanitarios y acopio de residuos.
Revisados los informes, la superintendencia detectó una infracción calificada como gravísima, que tiene relación con que el titular no habría realizado monitoreo de parámetros como temperatura, color real, conductividad, oxígeno disuelto, turbidez, sólidos disueltos, aceites y grasas; junto con no monitorear las aguas superficiales con frecuencia semestral.
Además, se cursó una segunda infracción, con clasificación leve, relativa a la no realización del muestro para el parámetro de coliformes fecales a través de una Entidad Técnica de Fiscalización Ambiental.
De acuerdo con lo informado por la SMA, la entidad privada arriesga una multa que va desde una a 11.000 Unidades Tributarias Anuales (UTA), es decir, una sanción que podría alcanzar los $8.794 millones.
En todo caso, la normativa establece que en este tipo de casos la empresa -una vez notificada- puede presentar un programa de cumplimiento en un plazo de diez días o, por el contrario, formular sus descargos como máximo en 15 días.