Hecho ocurrido el fin de semana luego de que una joven de 20 años, a punto de dar a luz, fue trasladada desde el hospital de Nueva Imperial hasta el hospital de Temuco. Según su familia existe responsabilidad por parte del equipo médico del centro asistencial, ya que el bebé presentaba lesiones. Desde el hospital Hernán Henríquez Aravena, señalaron que durante el proceso de parto “se presentaron complicaciones inesperadas que, a pesar de los esfuerzos realizados por el equipo médico, no pudieron evitar el fallecimiento del recién nacido minutos después de su nacimiento”.
Viviana Santander, abuela del bebé fallecido, explicó que la denuncia tiene que ver con los antecedentes de la madre que tiene diagnosticada diabetes y presentaba un embarazo de alto riesgo, cuyo parto debió ser por cesaría y no parto normal como ocurrió, esto por el tamaño del bebé que pesó más de cuatro kilos y medio y midió 57 centímetros. La mujer señaló que “era una guagua gigante, no podía nacer con parto normal, yo le reclamé a la doctora, le dije que por qué no le hicieron una ecografía y me respondió que no lo hicieron porque se basaron en una anterior. Ellos debieron haberse cerciorado, porque mi hija es diabética y tenía un embarazo de alto riesgo”.
Por lo anterior acusaron una negligencia del equipo médico e interpusieron una denuncia en la Policía de Investigaciones para que se indague si existe algún delito y establecer responsabilidades. “Lo mataron, lo dejaron todo moreteado, su cuellito suelto. Deberían ver el tema, yo quiero que esto se haga público, porque quizás a cuanta gente más le pasa lo mismo”, enfatizó la abuela del bebé.
En tanto, desde el hospital de Temuco respondieron a través de un comunicado en el que aseguran que el parto fue monitoreado por el equipo médico, siguiendo los protocolos clínicos establecidos, sin embargo, por complicaciones inesperadas del proceso de parto, los profesionales no pudieron salvar la vida del menor.
Además, agregaron que “para garantizar la máxima transparencia y con el propósito de reforzar la seguridad en la atención médica, la Dirección del establecimiento resguardarála realización de una auditoría de la mortalidad materno-infantil, el cual tiene como objetivo identificar oportunidades de mejora y asegurar la implementación de medidas que fortalezcan la calidad de la atención brindada”.