La Corte de Apelaciones de Santiago confirmó la decisión de indemnizar a una mujer víctima de la dictadura, quien en Temuco fue detenida y sufrió torturas y violaciones por parte de agentes del estado, en 1975.
Solo 19 años tenía Marcela Rosa Oyarzo Aguilar cuando, siendo estudiante universitaria, fue detenida y permaneció en prisión política por más de diez días, durante el mes de septiembre de dicho año.
De acuerdo con el relato que consta en la demanda de indemnización de perjuicios presentada por la Oyarzo, durante esos días fue duramente golpeada y agredida sexualmente, para luego ser abandonada en la calle en horario de toque de queda.
El caso y la demanda habían sido acogidos por un juzgado civil, pero el fisco apeló y tuvo que tomar una decisión la Corte de Santiago.
Revisando los argumentos de las partes, este último tribunal concluyó que “se trata de una mujer menor de edad, quien tenía 19 años a la época de ocurrencia de los hechos, siendo secuestrada, torturada, abusada y sometida a tratos crueles, inhumanos, vinculados, entre otros, al ámbito de su sexualidad –lo que no fue controvertido por la demandada– quien mantiene hasta la fecha secuelas psicológicas que han dificultado su vida”.
Otro elemento a considerar fue la violencia de género ejercida en contra de la víctima, fenómeno que se toma en cuenta como una constante del régimen militar de la época.
“El trabajo desarrollado por los órganos jurisdiccionales internacionales de Derechos Humanos en las últimas décadas ha permitido comprender que las mujeres fueron víctimas específicas de tortura por razón de su sexo, y así, las vejaciones sufridas por la demandante se enmarcan en el castigo material y simbólico que sufrieron muchas mujeres durante la dictadura”, se lee en el fallo.
En fallo dividido, se estableció una indemnización de $50 millones por concepto de daño moral.